
Como ya os comentamos, los niños que esta semana han participado en nuestros campamentos urbanos vivieron el pasado miércoles, 3 de agosto, una jornada muy especial, ya que recibieron la visita de María Zulaika, delegada de la Fundación Vicente Ferrer en Navarra.
Dentro de la programación de esta semana, dedicada a las diferentes culturas del mundo, el miércoles lo dedicamos a la India. La visita de María tenía como objetivo, por un lado, concienciar y enseñar a los niños la forma de vida de los habitantes de las áreas en las que trabaja la Fundación y los proyectos que allí realiza, y por otro lado, llevar a cabo unos talleres de Rangolis, unos dibujos típicos de las casas hindús.
Este proyecto forma parte de la estrecha relación que Le Bal mantiene con esta organización. El pasado mes de junio la escuela de baile obtuvo el sello “Empresas Comprometidas con la Fundación Vicente Ferrer” por su colaboración con esta ONG, que este año celebra su 20 aniversario.
Concienciando desde pequeños
La jornada comenzó con un pequeño vídeo explicativo de cómo era la vida en las zonas rurales donde trabaja esta ONG y de cómo gracias a las aportaciones de los cooperantes y al trabajo de los voluntarios han mejorado mucho sus condiciones de vida en diferentes áreas: sanidad, educación, vivienda, agricultura, etc.
Para que los más pequeños comprendieran todo mejor, María les contó la historia de una niña india que, como tantas otras niñas, gracias a la ayuda de la Fundación pudo estudiar y posteriormente trabajar para sacar adelante a su familia. Todos se mostraron muy interesados y curiosos y, al finalizar, realizaron muchas preguntas para saber un poquito más.
Rangolis, saris y bindis
La parte más divertida llegó cuando María desplegó sobre el suelo de la sala un montón de Rangolis para llevar a cabo este taller de pintura. Rangoli es una de las formas de arte más populares en la India. Esta palabra se utiliza para nombrar los dibujos hechos generalmente con polvo de arroz en el suelo de las casas hindús. Es una combinación de dos palabras: “Ranga” que significa dios y de “Oli” que se satisfará. Así, María enseñó a los niños que los indios suelen entregar estos diseños a sus dioses como ofrendas para que les traigan buenos presagios. Los niños fueron muy creativos coloreando los Rangolis y se lo pasaron en grande.
Y esto no fue todo, además escucharon música Bollywood, se vistieron con saris, los vestidos típicos de las mujeres hindús, y colocamos sobre la frente de cada niño un bindi, el elemento decorativo que utilizan en la India y en otros países de Asia.
Desde aquí queremos agradecer a María su visita y el trabajo que hizo por acercar a los niños de nuestro campamento esta cultura tan diferente a la nuestra y tan maravillosa. En Le Bal continuaremos trabajando en este sentido, ya que creemos estas experiencias son muy enriquecedoras para nuestros alumnos y suponen una gran oportunidad para los padres para educar en valores a sus hijos.